Como es habitual en nosotros, al momento de viajar buscamos alternativas e intereses para los pequeños de la familia. Esta vez, con la mayor de cómplice y con el dato que nos pasó una amiga, fuimos a la Casa del famoso Ratón Pérez, en la ciudad de Madrid.
Cuenta la leyenda que un ratón muy pequeño, con sombrero de paja, lentes de oro y una cartera roja colocada en la espalda, se escapaba de su domicilio y a través de las cañerías de la ciudad llegaba a la habitación del pequeño rey Buby y de otros niños que habían perdido algún diente.
El popular ratoncito Pérez fue creado por el jesuita Luís Coloma, para consolar al joven rey español Alfonso XIII tras perder un diente con ocho años de edad. La historia dice que el ratón vivía con su familia dentro de una gran caja de galletitas, en el almacén de la entonces confitería Prast, en el número 8 de la calle Arenal, en el corazón de Madrid.
En 2003 el ayuntamiento de Madrid rindió un homenaje a este personaje, instalando una placa conmemorativa en el mismo lugar donde el padre Coloma situó la vivienda del roedor.
Si bien es un paseo cortito, no mas de 30 minutos, los niños descubrirán en la visita guiada quién es el ratoncito Pérez, su familia, sabrán qué hace el ratoncito con sus dientes, por qué nunca se deja ver, y sobre todo verán la casita en miniatura del ratón y su familia.
Las preguntas de los más chicos por su personaje favorito a la edad de cambiar los dientes, se evaporan en el mismo momento que entran al edificio, con una pequeña estatua del ratoncito, o carteles que los irán guiando hacia donde hoy se encuentra un pequeño museo.
“No dejes la inocencia, que es buena amiga; pues echarás de menos su compañía.”
Melchor de Palau
Pato.
Genial! me encantó. Me tengo que apurar a llevarlos porque en poco tiempo ya no tendrán ilusión en el tema.
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Gracias Juano ! Claro que si ! Si se puede, para estos paseos hay que apurarse y agarrar la edad justa, porque crecen muy rapido, y despues ya no es lo mismo.
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